Hoy, el 24 de enero, es un día para festejar la educación. En 2018, la Asamblea General de la ONU decidió declarar este día como el Día Internacional de Educación para celebrar la importancia de la educación para la paz y el desarrollo. Este año, el tema del día es “Cambiando curso, Transformando educación” y se busca generar debate sobre cómo fortalecer la educación como un bien común y derecho de todas las personas, cómo dirigir la transformación digital, apoyar a las y los docentes, cuidar la planeta y desarrollar la potencial de todas las personas para que puedan contribuir al bienestar colectivo y la planeta.
Como señala la Directora General de la UNESCO, Audrey Azolay, en el marco de este día:
“En esta época excepcional, no podemos seguir haciendo lo mismo de siempre.
Si queremos transformar el futuro, si queremos cambiar el rumbo, debemos repensar la educación. (…) Tenemos que reparar las injusticias del pasado y orientar la transformación digital hacia la inclusión y la equidad. Y necesitamos que la educación contribuya plenamente al desarrollo sostenible, por ejemplo, integrando la educación ambiental en todos los planes de estudios y formando a los docentes en este ámbito.”
Comparto plenamente la idea de que es necesario transformar la educación. Por supuesto, es importante que se hagan estos cambios desde arriba. Pero creo que también podemos – y debemos - transformar la educación en nuestro trabajo de día a día como docentes y educadores.
Una parte de esta transformación para mí es enfocarse más en las habilidades del siglo XXI de los que hemos estado hablando en los artículos pasados que en solo transmitir contenidos. Desarrollar y practicar estas habilidades pueden apoyar a las niñas, niños y jóvenes y personas adultas poder responder mejor a los retos del futuro y de la actualidad. En Ilo Education, este justamente es uno de los temas principales en que queremos apoyar a los docentes e instituciones educativas: encontrar modelos y métodos que permiten enseñar y fomentar estas habilidades más, y también apoyarlos en que sus estudiantes encuentren y puedan desarrollar su pleno potencial. Y si lo podemos hacer a través de la educación ambiental y de sustentabilidad, que en mi opinión personal en su transversalidad es una excelente vía para practicar y fortalecer las habilidades, qué mejor.
Mi compromiso personal, como docente y como alguien que capacita a docentes, es buscar a contribuir a esa transformación que quiero ver para el futuro a través de mi trabajo. Y preguntar siempre: ¿Qué lo que se hace ahora, funciona y debe seguir? ¿Qué puede funcionar, pero debería ser modificado para mejorar? ¿Y qué hay que dejar de hacer?
A ti, ¿Qué transformación te gustaría ver en el futuro y en la educación? ¿Cómo puedes contribuir a ese cambio desde dónde estás ahora?